El cernícalo primilla, especie ya extinta en algunos países, sufre una seria resección en la península ibérica. En Trujillo, localidad de la provincia de Cáceres, la población de cernícalos primilla o "micales" como se les llama familiarmente en la localidad, padecen los problemas comunes como son la pérdida de su hábitat de alimentación por los cambios y abandonos de cultivos, pérdidas de alimentos (insecticidas), pero un claro factor es el forzado desplazamiento de la colonia por los grajos y palomas hacia la plaza de toros, también las molestias humanas como son el cierre de sus nichales o agujeros en la pared, y las restauraciones de los tejados y la consiguiente pérdida de su hábitat bajo teja, sitio preferido por la especie.
El cernícalo primilla una rapaz, un pequeño halcón urbano, (longitud 27/33 cm, envergadura 58/74 cm y peso 150/180 gr). El macho, menor que la hembra, cabeza azulada, dorso pardo rojizo y cola gris azulado. Partes inferiores de color leonado rojizo con moteado negro.
Hembras y jóvenes con cabeza y dorso marrón-herrumbroso moteado en pardo-oscuro, al igual que las alas y cola, por debajo color crema con fino rayado en pardo-oscuro que se intensifica hacia el pecho. Garganta clara. Banda ancha subterminal, en la cola, pardo-oscuro, con fino borde blanco. Puntas de alas más oscuras.
Para ambos sexos: anillo ocular, cera del pico y patas amarillo anaranjado. Pico gris blancuzco, más oscuro en la punta, negro, aclarándose hacia la base. Iris pardo-marrón. Uñas blancas.